Remache semitubular

Los remaches semitubulares son similares a los remaches de punzonado sólido, excepto por el hecho de que son parcialmente huecos (lado opuesto a la cabeza) en la punta. La finalidad de este hueco es reducir la cantidad de fuerza necesaria para la aplicación haciendo rodar la porción tubular exterior. La fuerza necesaria para poner un remache semitubular es, aproximadamente, 1/4 de la necesaria para un remache sólido.

El proceso es similar: se colocan las capas metálicas entre el soporte y la matriz. Con el movimiento del punzón, el remache penetra la primera capa. Gracias a la forma de la matriz y del remache, este se expande dentro de la siguiente capa, sin cortes ni punzonados.

La inserción de los remaches semitubulares requiere el acceso a ambos lados de una estructura. La principal diferencia entre el remachado de punzonado y el remachado común es que no requiere perforar un orificio ni punzonar de antemano. El remachado de punzonado implica que son los remaches los que punzonan el orificio, facilitando y agilizando el proceso de unión.

Los remaches semitubulares tienen las siguientes ventajas:

• Unión de materiales diferentes y con distintos revestimientos
• Unión sin cabeza ni distorsión
• Conexión sólida: comprobable visualmente
• Sin perforación ni punzonado de orificios de antemano
• Permite la unión de distintas resistencias 
• Permite procesos automáticos y rápidos
• Sin centrado bajo los orificios de los remaches
• Alto potencial de racionalismo
• No requiere demasiado equipo de seguridad
• Sin impacto en la contaminación del lugar de trabajo
• Amigable con el medio ambiente